En el tercer disco del dúo pop que conforman Betty y Fran encontramos canciones perfectamente enmarcadas en nuestra sociedad actual y que reflejan sensaciones y preocupaciones en las que fácilmente puedes llegar a identificarte.
Con frecuentes loops discotequeros, "Perdida" es quizás el mejor reflejo de esto, cierto aire místico y con un lenguaje bastante claro, "Flores Raras" abordan temáticas referentes a estilos de vidas.
Con "ceros" encontramos una reflexión histórica sobre la herencia de décadas pasadas hasta llegar a "nadie me escribe, nadie me llama", tema en el que colabora Andermay y que pasa por ser el más arriesgado del disco y donde ponen de manifiesto cómo las nuevas tecnologías y en especial Internet nos ha modificado conductualmente.
Personalmente encuentro similitudes entre Flores Raras y Mecano aunque lógicamente perteneciendo a épocas musicales distintas. La voz de Betty se muestra muy capaz de abordar distintos registros y acompaña coherentemente la tonalidad del tema en cuestión.
La colaboración con Lorca en la canción homónima al disco, "Efectos secundarios", pasa por ser otro buen hit, muy al tipo de "Flores Raras" en un mundo con prisas pero en el que no podemos abandonar ni las ganas ni la actitud frente a él.