La pasada noche del 15 de diciembre finalizó el festival "Agústico" celebrado en el teatro García Lorca de Getafe.
El encargado de poner el broche final a este festival fue Shuarma, ex-componente del Grupo "Elefantes".
A las nueve de la noche subía al escenario vestido con una americana, que poco le duraría, camiseta blanca y vaqueros oscuros. Un look desenfadado como su actitud durante el concierto.
En el escenario sus únicos acompañantes fueron Julio Cascán, ex-componente también de «Elefantes», al bajo, su guitarra y un loop-station con el que modificaba los sonidos procedentes de su voz y de la guitarra.
Shuarma se subía al escenario para presentarnos «Grietas en una casa abandonada». Una reedición de su último trabajo, «Grietas», grabado en diferentes partes de una casa abandonada real de Valencia. En palabras del propio intérprete barcelonés «Grietas» es un disco «duro» debido a la época por la que estaba atravesando en el momento de componerlo.
El concierto comenzó con «Tú», seguida de «Lo que queramos creernos» y «Solo». Todas ellas pertenecientes a su último trabajo.
Tras éstas el repertorio dio un salto al pasado recordando temas de tu anterior disco: «El poder de lo frágil» como «La única opción» y «Despierta».
No faltaron tambíen temas de su época con «Elefantes» como «Por verte pasar», «Somos nubes blancas», «Me gustaría hacerte feliz» y uno de los temas más coreados de la noche «Que yo no lo sabía».
También tuvo un momento para recordar algunos temas de su primer album en solitario «Universo» como «Te esperaré».
El momento más emotivo de la noche fue durante el descanso que se tomó Julio Cascán. Shuarma permaneció solo en el escenario y sólo con la guitarra, sin amplificadores ni micrófono, sentado al borde del escenario interpretó «El tiempo se puede parar», tema que ha grabado con Enrique Bunbury. Esta intimísima interpretación levantó de sus asientos al público que prácticamente llenaba el patio de butacas y que ovacionó al cantante barcelonés.
Shuarma se metió al público en el bolsillo no sólo con su gran interpretación en directo. También con alguna anécdota, su cercanía y sentido del humor y reivindicaciones sobre la situación actual del país y la falta de apoyo y oportunidades de las radios hacia las nuevas promesas de la música.
Shuarma puso el punto y final al último concierto del festival celebrado por primera vez en la localidad madrileña con el tema «La felicidad».
Fotos: Verónica Marín.