A continuación las crónicas realizadas por nuestro colaborador Alberto Ferraris en lo que la segunda jornada del festival respecta.

Nisei
Nisei fué la gran sorpresa de la noche del viernes. Un grupo valiente, o, tal vez inteligente… seguramente ambas cosas.

Y es que Nisei pueden que no hagan una música 100% original y que se les noten sus influencias, pero tienen el caracter necesario para salir y cantar sus temas en catalán y sin medias tintas, con una buena potencia.

El concierto me sorprendió por ser muy ruidoso, nada de pop blandengue, pero ademas fué un ruido inteligente, con unas guitarras muy sonoras y contundentes pero sin llegar a ser pesadas como en el metal. Me recordaron mucho a los injustamente olvidados por la historia Hammerhead que mezclaban un hardcore punk muy seminal y más aun incluso recordaban a Vaz, ese proyecto para escapar del planeta tierra de los supervivientes de Hammerhead. Se olia ese espiritú, aunque Nisei sean más moderados, y, transmitir eso seguramente no te hará triunfar en la radiofórmula pero te hará vivir largos años en algunas pocas mentes privilegiadas.

Ademas del nivel vocal en el que varios de sus miembros se alternaron y ayudaron durante el show a nivel instrumentistico estuvieron exquisitos, con una excelente base rítmica, con trompetas que competian con los riffs de guitarra y con algunos teclados en momentos señalados.

Mobiil
Cuando los franceses Mobiil saltaron a las tablas, en forma de trio, aunque en la trastienda llevaban teclados y algun sampler, no me imaginaba que su sonido fuera a ser tan denso y oscuro, más aun cuando saludaron al publico con un "hello punk rockers". Los chicos de mobiil levantarón una tormenta sónica con pesados riffs de guitarras que incluso en la lejania te hacian recordar a Rammstein y todo ello acompañado de ritmos industriales y no tan industriales un poco más trip-hop. Y todo ello siempre con una gotita de punk. Se agradece cuando un grupo se aleja de los cliches tan copiados por muchos grupos y mezclando y experimentando te ofrecen un producto realmente interesante.

Barry Adamson
A priori Barry era el más esperado de la noche, aunque reconozco que cuando te llevas una grata sorpresa con grupos de los que no tenias referencias, algunas otras pasan a un segundo plano. El concierto de Barry fué realmente bueno. Y tuvo un comienzo nada funky más bien siniestro, con un sonido atronador y denso que lograba una atmósfera realmente inquietante. La banda vestida de etiqueta y con muchas tablas demostraron no ser unos carrozas. Estuvieron impecables.

Por otra parte Barry que formó en el pasado parte de Nick Cave and the Bad Seeds y de Magazine con su voz potente y su teatralidad fué el centro de atención
de la actuación, en partes recordaba incluso a Frank Sinatra. La primera parte del concierto fué increible y nada convencional, sin medios tiempos ni concesiones.

Mucha potencia y ritmo hipnótico, sin embargo, mediado el concierto los temas perdieron todo ese groove que desplegaron inicialmente y el concierto tuvo un pequeño bajón. Luego se recuperaron otra vez con un final más experimental en el que Barry se dedico a machacarnos con descargas de feedbak mediante un ampli y una pedalera.