Alrededor de 150 personas nos dimos cita el viernes 16 en la Fun Club para disfrutar de un concierto de Marwan, cantautor atípico donde los haya. Y es que, si bien muchas de sus canciones son tristes (que para algo es cantautor), no he asistido nunca a un concierto donde me haya reído más. Marwan no se limitó a presentar su nuevo disco Las cosas que no pude responder, repasar los anterores y leer algunos de los poemas del libro que publicó hace poco, La triste historia de tu cuerpo sobre el mío, sino que se preocupó de que los que fuimos allí nos divirtéramos, ¡y de qué forma!
Antes de salir Marwan al escenario tuvimos la oportunidad de entrar en calor con Alarmantiks, teloneros improvisados que tocaron tres canciones y animaron al público que bien lo necesitaba, ya que el frío que pasamos esperando fuera nos había acompañado cuando entramos y se quedó un rato con nosotros. Eso sí, el grupo se nos presentó en formato reducido, con un percusionista con un cajón, un guitarra-cantante (que como nota curiosa, os sonará si erais seguidores de Sé lo que hicisteis) y un teclista que, ante la ausencia de teclado, observaba a sus compañeros desde el público. La verdad es que no lo hicieron mal y no habría sido ningún problema que el concierto hubiera empezado un rato antes para darles tiempo a tocar algún tema más.
Tras este pequeño aperitivo salía Marwan al escenario, ¡y empezó el show! Y es que no es para nada normal encontrarse a un cantautor que compone estupendamente bien, que interpreta fenomenalmente y que, además, bien podría acudir a El club de la comedia y hacer uno de los mejores shows del mismo. Si no has ido nunca a ver a un concierto de Marwan, es una de tus asignaturas pendientes seguro, y si has ido ya sabes a lo que me refiero, no sólo interpreta sus canciones, sino que entre una y otra (y a veces en medio de las mismas) hace comentarios, bromas, cuenta historias… hubo momentos que me dolía la mandíbula de tanto reírme (y no es una forma de hablar).
Marwan iba acompañado de Marino Saiz, un violinista excepcional que hizo que las canciones sonarán aun mucho mejor y que tuvo que soportar las bromas que Marwan hizo a su costa, provocando incluso que el público le cantara y coreara. El pobre no sabía dónde meterse y había momentos en que le costaba mantener la serenidad y no reírse (igual que a todos los presentes claro).
A mitad de concierto Marwan invitó al escenario a la joven cantautora sevillana Adriana Moragues, la cual interpretó un tema junto a Marino (el cual improvisó totalmente haciéndolo muy bien). La verdad es que la chavala tiene un estilo bastante personal y sorprendió a los allí presentes. Merece la pena seguirla, sin duda.
Hacia el final del concierto Marwan presentó algunos poemas de su último libro y, antes de tocar Canción a mi padre, aprovechó que eran las 23:59 del día de su cumpleaños para llamarle, felicitarle y hacer que nosotros le felicitáramos para después, tocarle dicha canción a través del móvil. Uno de los momentos más emotivos del concierto, sin duda.
El último tema del concierto fue Palabra por palabra, para el cual Marwan y Marino bajaron del escenario para ponerse en el centro de la sala y tocar, ya desenchufados, rodeados del público. Genial detalle. Y eso fue todo, que no es poco. Un conciertazo en el que Marwan demostró una vez más por qué hay que ir a verle siempre que haya oportunidad y que nos sirvió a algunos para descubrir a Alarmantiks y Adriana Moragues… ¿alguien da más?
Pronto más fotografías en: http://www.flickr.com/photos/galeriamusiqueando
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