Y llegó la noche del viernes. La Sala Mercantil recibió a “Nudozurdo”. El trío se sumó a la distancia corta en Badajoz ante un aforo estimable para presentar “Tara Motor Hembra”, el último trabajo editado de los madrileños.

Con un repertorio del último disco, “Prometo hacerte daño” “Conocí el amor” “El diablo fue bueno conmigo” rugieron en la sala durante la hora y media de directo. Dejaron hueco, no era para menos, a  éxitos de trabajos de “Sintética” como “Ha sido divertido”.  Ligeros inconvenientes de sonido enturbiaron el inicio y marcaron la dinámica de lo que se auguraba como una constante armonía inadvertida y reprimida. Sin despliegue. Dinámica que, no obstante, salvaron las prodigiosas manos del bajista “Meta”.

Parafraseando a uno de sus temas acompañaron la velada con ritmos a los que fielmente nos tienen acostumbrados. “Sucios” y oscuros. Indecentes y sombríos. Estatismo a golpe de guitarra que contrastó con un bajo virtuoso y una batería ejemplar. Disipada efervescencia. Derrochado despliegue. Lo dicho, fue “divertido” mientras duró.

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