Dicen que lo bueno, si breve, dos veces bueno… puede ser cierto o no, dependerá desde el prisma que lo miremos, pero esta noche ocurrió así. Presentación en MobyDick de Panicotidiano, la puesta de largo de NiñoMalalengua, que ya viene haciéndolo de igual manera y que se meten en gira para de nuevo acabar después del verano en Madrid. Intensidad y sensaciones extremas.
Pero esta noche también sirvió para realizar comparaciones de esas llamadas odiosas, pero que no lo son tanto cuando dicho odio es algo real y tangible, una sala a medio llenar y con gente de esa llamada moderna, donde lo que importa es simplemente la apariencia, el que dirán y lo fácil de las cosas. A veces Los Guapos no lo son tanto y se quedan con esa coletilla de esa película, el… el feo y el malo.
Pues el bueno quedó para los que tenemos el `Corazón Desenfocado´. Lo demás me importa un pimiento. Lo alternativo está en nuestras mentes, no en un simple disfraz que no nos lleva nada más que a las risas tontas de aquel otro que nos mira. Hay que buscar más, ejercitar la mente y el corazón, no dejarlos ahí esperando que nos den algo supérfluo y ñoño.
Una banda bien armada, guitarras que nos rasgan desdes fuera hacia adentro, como si quisieran matar nuestras esperanzas `Asesinados de Papel´ nuestros anhelos pero que al mismo tiempo nos envuelven en una coraza de un frío metal, de esos que no traspasará nadie hasta que sea su tiempo. Esos recuerdos a Loquillo, ese oscurantismo, ese color, el negro, el que siempre nos espera al final. Y como no Radio Futura, tan presente, tan buen aporte que les lleva más allá de lo creido.
Un puñado de canciones de NML fueron suficientes para darnos cuenta que necesitamos más. Sin saber aún porqué tuvimos tan poco tiempo para que se metieran dentro de nosotros, corea en mi cabeza cada uno de esos acordes `Mis Ejercitos de Sal´ que queman el tiempo y nos va haciendo mayores pero que nos permiten ver lo que otros no verán jamás. Un guiño a Sidonie desde luego pero alejado de la broma de aquellos.
Breve desde luego, pero intenso, nos dejaron sin algún toque más del disco, ese `Amsterdam Fotomatón´ o `Tu Peor Animal´ pero esa voz que no te deja quieto, quebrada quizás, alejada de princesas bipolares, capaz de marchitar una simple flor y un segundo después revivirla con un suave susurro, esos dos disparos que tienes para los dos, guárdalos que no son necesarios. Larga vida a NML y por supuesto, esperamos ese verdadero fin de fiesta tras la cortina de la sala Sol. Allí nos veremos y os meteréis dentro de nosotros otra vez.
Gracias a Josune y Astromúsica por su buen hacer y colaboración.