Su primer disco se llama “A ver quién llega antes del fin”, un debut con el que se han dado a conocer y con el que han conseguido críticas muy positivas en gran cantidad de medios y entre el público general. 10 canciones con revestimiento folk cuya base es, en mi opinión, el pop heredado de bandas tan españolas y a la vez tan atemporales como Los Brincos o Lori Meyers, aunque Cristóbal no está muy de acuerdo: “La verdad es que no soy seguidor de los grupos que nombras, pero aunque no sean una influencia directa, sí hay muchas bandas españolas que nos gustan. Supongo que el cantar en español hace que te comparen con otros grupos que cantan en español. Tampoco somos un grupo folk anglosajón ni pretendemos serlo. Tenemos claro que lo nuestro es el pop, aunque sea adornado de determinada manera”. Y una colaboración de lujo: la fascinante y turbadora voz de Tulsa, cuya colaboración en el tema Río Abajo “surgió porque ella es amiga de nuestro manager y se lo propusimos y aceptó encantada. Quedamos muy contentos con la colaboración y recientemente pudimos llevarla a cabo en directo“.

Un disco auto producido, es decir, pagado por ellos, y que se puede descargar gratuitamente en su propia página web www.mañanaweb.com. ¿Necesidad, o es que nadie creía en vosotros? “Un poco por todo. Tuvimos ofertas de sellos pero las condiciones eran muy malas, así que decidimos hacerlo nosotros y, la verdad, no nos arrepentimos. Animamos a todos los grupos que están empezando a que lo hagan”. Una forma de distribuir su trabajo que facilita el ser conocidos, pero que en el aspecto económico supone haber hecho un esfuerzo. ¿Realmente salen las cuentas? “Sí claro, entre los discos que vendes, y los conciertos que haces se recupera la inversión. Afortunadamente en los tiempos que corren gracias a la tecnología grabar un disco no es excesivamente caro”. Y, bueno, en lo referente a los asuntos sgae y ley Sinde… “creo que nuestra posición es clara cuando regalamos el disco en descarga por internet con una licencia Creative Commons. La ley Sinde no es más que un intento por mantener una industria discográfica caduca que no ha sabido adaptarse a los tiempos. Lo más divertido es que ellos mismos (los grandes sellos discográficos) han cavado su propia tumba durante los últimos 20 años promocionando artistas sin ningún tipo de talento para hacer dinero fácil, rápido y canciones del verano. Será un placer ver cómo se hunden uno tras otro”. ¿Se puede decir más claro?

Por último, el 2011. “Ahora mismo acabamos de empezar a componer canciones nuevas para nuestro segundo disco, que probablemente grabemos en verano”. Y de conciertos y festivales “a día de hoy no te puedo decir que haya nada totalmente confirmado, pero sí que estamos tanteando fechas que anunciaremos próximamente”. Impaciente estamos. De verdad lo digo.