«No acertamos hacia donde vamos, quizás sigamos en el mismo lugar». Así es como comienza Solo, la canción  que da nombre al nuevo trabajo de Lõbison. No sabemos si ellos realmente saben hacia dónde van, pero de lo que sí estamos seguros es que van por el camino correcto, y una gira de otoño con más de una veintena de actuaciones por toda la geografía peninsular, en tan solo dos meses, cercioran todas y cada una de las críticas sobre su buen hacer.

Para los sevillanos Lõbison, Solo, no es su primer trabajo sino que es un punto álgido en su trayectoria musical, habiendo publicado en 2011 Para muchas amigas mías bajo su anterior nombre Falso Cabaret, en 2012 y ya utilizando su actual nombre Encuentra Mi Necesidad y en 2013 Perro Amor donde contaron con el batería David García, ex de Maga.

Solo, mucho más que un disco, es un cúmulo de sensaciones a flor de piel unidas de una manera muy íntima por la grave voz de Juamba d´Estroso y la guitarra y el bajo de Santi García. A través de tres personajes, la doctora, la bestia y el enfermo (el cual encarna al propio narrador) personifica sentimientos carnales y autodestructivos como la soledad, el amor incondicional, el miedo, el abandono, la enfermedad y la decadencia. Es la historia de estos personajes la que nos guía a través de un viaje cargado de melancolía, sueños rotos y de evolución forzada, llegando estos a la propia maduración personal que es sino, la realidad en la que vive cada uno.

Una muestra esta emulsión de sentimientos se ve reflejada en los versos de Tranquilo, el narrador aparentemente se haya postrado, enfermo y su doctora se ofrece para cuidarle pero… “Entonces él siente un gran deseo de ser bueno, de quedarse con ella para el resto de la vida. Su querida doctora entrevé que hay algo dentro de él, que se desangra para siempre. Tranquilo…” Versos duros, versos para pensar y recapacitar, versos que pintan la realidad tal y como es, versos bellos y dolorosos, como la vida misma.