Con el punto de partida bien anclado en el grunge noventero y las raíces americanas la banda barcelonesa Lipzia firman un disco dinámico en castellano.
De una línea de bajo notable (por Esteve Martínez) en Tóxica, al estribillo pegadizo de A solas siempre conducidos por una voz agradable (de Gerard Cabot) y unos arreglos que endulzan o potencian la canción a su antojo el disco va discurriendo rápido entre letras escrurridizas, de andar deprisa.
Puede atropellarte la batería (Oscar Pardo) en Sabrás llegar o viajar de Polizonte al son del ritmo de la guitarra (Toni Mena) para llegar a cualquier parte partiendo casi siempre desde cero, sin mirar mucho atrás y ávido de encontrar nuevos horizontes. Lipzia lo ha encontrado un rumbo certero.