
Sin duda un buen marco para presentar un disco de rock, en el que se mezclan temas que ponen de manifiesto las realidades sociales existentes tanto en su país como en cualquier país del “1er mundo” con temas muy personales, todos ellos compuestos por esta artista.La verdad es que como os comento la puesta en escena prometía, bajo, guitarra, teclados y batería, y Kany, en el centro del escenario, alternando entre la guitarra acústica para las canciones más intimistas o tranquilas, y la potente guitarra eléctrica para los temas más poderosos.
Notábamos ciertamente nerviosa a esta chica en su comienzo, se le secaba la garganta cuando intentaba explicarnos lo importante que para ella era estar presentando este disco aquí en España, al ser la mitad de su familia provenientes de Murcia, pero en cuanto dejaba de hablar y comenzaba a cantar toda ese aparente nerviosismo se transformaba en fuerza y garra y su voz y canciones llenaban el escenario.
El ritmo del concierto también fue muy bueno ya que en algunos momentos el escenario estallaba de sonidos con la potencia de toda la banda sonando al máximo (nos admitía que se sentía orgullosa de poder estar tocando con su banda de siempre traída desde su tierra), y otros momentos en los que la banda desaparecía, las luces se apagaban, y los focos iluminaban solo a Kani, que sentada en su taburete al estilo cantautor nos emocionaba con canciones llenas de historias.
Cada canción comenzaba con una pequeña introducción en la que nos presentaba qué emociones o experiencias le habían llevado a componerlas, lo cual hacia que el público se pudiera identificar aún mas con cada historia.
En resumen que no nos extraña que una multinacional todopoderosa como sony haya dado su respaldo y apoyo a esta chica, nos podemos imaginar a Kany presentándose en el despacho que cualquier directivo del mundo de la música, plantando allí su guitarra y sorprendiendo al más pintado con sus canciones y su voz.
Sin duda seguiremos hablando de esta chica…