A veces 45 minutos no dan para mucho, y otras en cambio es tiempo sobrado. En esta ocasión fueron los que tuvimos, pero para bien. Los minutos para descubrir a Jonquil y salir con un buen sabor de boca y con una sonrisa esbozada en el rostro.
El Café la Palma abrió como suele ser costumbre su cortina para dejarnos entrar en su mini sala, llena hasta la bandera y ahí en las escaleras nos quedamos para sentirnos un jonquil más en esa noche.
Como uno de los primeros conciertos del 15º aniversario de Acuarela ( Felicidades!!! ) y presentación del que es su último mini álbum ‘Whistle Low’, estos jóvenes de Oxford derramaron sus ganas de agradar y su entusiasmo hasta contagiarnos a todos los presentes, apretados como suele ser habitual en esta sala, pero por eso, redondo salió el tiempo que estuvimos, recordando temas de ‘Lions’, derrochando energía sobrada, sacándonos de las circuiterías habituales de la música acostumbrada a nuestros oidos, seis instrumentos, melodías intensas de glockenspiels, silbatos y flautas, un juego de preciosismo e imposibilidad traída hasta aquí. Canciones como ‘Lions’ perfecta para alguna de esas bandas sonoras, donde queremos ver como la vida se abre camino tras un desastre, porque no digna de Expiación; sorprendidos de verse en la pared mientras tocaban, siguieron aumentando el ritmo de las emociones ‘Sudden Sun’ de forma maravillosa, adentrándonos en mundos imaginarios llenos de dulzura y explosiones varias ‘ Babe, so now why no?’ o ‘Whistle Low’ para hacernos sentir por un momento ese pequeño niño que seguimos llevando, recordar la sencillez de las cosas…
Y así, con la sala entregada, en perfecta simbiosis con estos chicos, se nos acabó este precioso ratito de algo maravilloso, dulce y también gracioso, uno de esos momentos que no os podéis perder, que os gustarán…