Aprovechamos la reciente actuación de los “granaínos” Hora Zulu en Valencia para hacer una revisión de lo que ha sido el último larga duración de la banda, el esperado “La voz del amo”.
Ciertamente que hace ya un tiempo que se pusó a disposición del público a través de plataformas digitales y formatos físicos, pero me apetecía mucho dedicarle unas cuantas líneas al más reciente trabajo de una banda con tanta solera como lo es Hora Zulu.
Aitor y los suyos han tardado más de un lustro en sacar nuevo material en Lp, pero en todo este tiempo no han perdido ni un ápice de su esencia. Siguen creando temas que mezclan el Rock & Metal y el Hip Hop con unos notable toques aflamencados, alcanzando a ofrecer un Metalcore andaluz (si se me permite la etiqueta) que resulta de los estilos más reconocibles de la escena Metal nacional.
No sabría decir si Hora Zulu reciben un justo reconocimiento dentro del mundillo musical español, dada la calidad de sus composiciones a nivel instrumental y lírico, pero se me antoja insuficiente. Aunque a ellos no parece importarles, no parece que hagan gala de la celebérrima “mala follá granaína”, al menos en este ámbito.
Pero yendo al grano de lo que es este “La voz del amo”, he de decir en primer lugar que no es mi álbum predilecto de Hora Zulu. Sin duda, conserva toda la impronta de su sonido y han vuelto a echar mano de todos los atributos que adornaban el soberbio “Siempre soñé saber sobre nadie negó nunca nada” o el más rockero “Querer creer, creer querer”. Esto es, una base rítmica contundente a manos de Javi Cordovilla más el bajo de Álex Bedmar, guitarras versátiles en mano de Paco Luque que sepan dar el contrapunto a una voz rapeada tan personal y serena como la de Aitor Velázaquez, además del sempiterno toque andaluz. Los ingredientes son los mismos, tan solo se me ocurre que aquellos (particularmente “Siempre soñé…”) contaron con un enorme grado de inspiración demostrado en cortes que entran como un trallazo a la primera como “Mis barraqueras” o “Gabinas de cochero”. Este “La voz del amo” requiere de una escucha más pausada, pero ofrece todas las garantías de que gustará a los seguidores del Hora Zulu.
El disco lo componen diez cortes, comenzando por “Cave Ventum”. Un tema duro en música y voz en el que es inevitable encontrar las reminiscencias andaluzas en la sonoridad de la guitarra de Paco Luque.
En “La voz del amo” cabe destacar en mayor manera la notabale producción que adquiere el disco, tal vez la más elaborada de la discografía de Hora Zulu. Para mayor información, aquí están los datos técnicos: Baterías grabadas en Sonobalance Estudios (Granada) en enero y diciembre de 2018. Ingenieros de sonido: David Fidel Castro, Sergio Vera y Alberto Chamorro. Mezclado por David Fidel Castro en Bombtrack Estudios (excepto tracks 5 y 8 –los dos adelantos del pasado año-, mezcladas por Rémy Deliers en Lille, Francia). Masterizado por David Fidel Castro. Producido por Javi Cordovilla que comparte arreglos con Paco Luque, compositor de la música. Aitor, de las letras.
También hacer notar el enorme talento del sr. Velázquez al volver a crear y rimar frases que a cualquiera costaría encuadrar entre los ritmos y los riffs de sus compañeros, amén de mellar algunas conciencias por lo que dicen.
Pero “La voz del amo” no deja de abastecerse de la experiencia adquirida por la banda a lo largo de cinco discos previos. Lo digo porque “Se non è vero” me recuerda al sonido de sus primeros álbumes. Cobran más notoriedad las voces, además de que creo que el solo de guitarra podría haberse trabajado un poco más.
Como contrapunto, “Es menester” resulta con un ritmo trepidante que parece compensar una voz más acompasada. Un canon este que resulta muy interesante.
No olvidemos que Hora Zulu anticiparon este álbum con dos singles, de los cuáles “Beatus ille” fue uno. Elegido no sin intención, pues particularmente me resulta complicado no recordar “Gabinas de cochero”, por ejemplo.
Pero si tendo que destacar algunas, sin duda “Pena mora” me resulta particularmente atractivo, generando una tensión en todo su desarrollo que acaba liberándose en el potente punteo que remata el tema.
“Romance de Juan de Elvira” queda marcado por el estilo de Hip-Hop en la voz, muy acuciado, que parece servir de preámbulo al otro single pre-editado, “Y si acaso”. De nuevo, otra colaboración con el insigne R de Rumba de los Violadores del Verso, como ya ocurriera en el celebrado “Luego querrán” o en “Con un gesto”, años antes. Y es que la unión de dos abanderados del Hip-Hop y el Metalcore ha de dar sus frutos siempre.
Pero para colaboración estelar, la de los mismísimos S.A. en “Hanalfabeto y ortera”. Un tema combativo, al estilo de ambos, donde parece que Hora Zulu se embrutece y Soziedad Alkohólika se contienen para encontrarse en un punto medio. Un trabajo que deja entrever que, más allá de reivindicaciones y letras de batalla, esto se trata de hacer música en grande.
Y para terminar, Hora Zulu se reivindica con una canción muy de su estilo. Con un sonido y unos ritmos en los que se sienten como pez en el agua, y con los que han conformado “Fuera / Román paladino”, para dejar patente y hacer notar que siguen siendo ellos. Años después, conciertos después… Hora Zulu no pierden su sitio.
Esperamos una gira más extensa pronto y disfrutar de todo esto en directo.