El pasado viernes, el rapero navarro Hofe, acompañado de 4:40 (Rem Zelak y Hattori Hanzo) presentó ante el público madrileño la exitosa mixtape Amodioa. En este trabajo, viajamos entre el odio y el amor, o más bien el desamor, con melodías electrónicas mezcladas con barras llenas de carisma y chulería.
Podríamos decir que lo que está haciendo Hofe es seguir el camino correcto. Aparte de su contenido musical publicado en los últimos años, destaca su intención, sus ganas, su afán por demostrar porqué está donde está. «Estamos haciendo ruido como la moto de un cani», dice en Joven Lehendakari, uno de sus temas más reconocidos, asegurando lo que todos sus seguidores piensan, que están haciendo ruido dentro de esta industria tan competitiva. La escena puede gozar ahora mismo del joven talento del norte, de la mano del joven de Iruña personalmente pero también de todos los integrantes de la Chill Mafia. La falta de tabús y tapujos a la hora de contar sus vivencias crean una amalgama de sensaciones inexplicable. Fundadores de un estilo y concepto marcado e inigualable por nadie de la escena actual, consiguieron llenar la Sala Clamores el pasado viernes 7 de octubre. Se le veía tranquilo y confiado, sabiendo que la gente que estaba allí le iba a gritar cada una de sus letras, y efectivamente así ocurrió. Más de una vez oímos cánticos de «ari, ari, ari, Hofe Lehendakari», como si de un partido de fútbol se tratase. Y él respondió con amabilidad y agradecimiento, demostrando que no siempre es necesario interpretar un personaje, que a veces basta con ser uno mismo. Fuera de la histórica Sala Clamores, tuvimos el placer de charlar con él y hacerle unas fotos junto a 4:40 (incluidas al final del artículo), exhibiendo su forma de ser y su humildad con sus fans, que no se sienten fans, se sienten parte de esta movida.
Destacamos Kurosawa, en mi humilde opinión su mejor tema, fusionando el séptimo arte con la música, como vemos en estrofas como «Soy Korben Dallas, y tú Leeloo» en referencia a El Quinto Elemento, «Menos serio, más descaro, mucha calle, Vaquilla y Jaro», alusión al cine kinki que tanto marcó el País Vasco de los 80, «De invierno a verano como Éric Rohmer», cineasta y autor de Cuentos de las cuatro estaciones o «Si esto es Memento, tú eres Natalie», elogiando al filme de Christopher Nolan. Y muchas más referencias que demuestran el trasfondo audiovisual del navarro.
Otro de sus temas más gritados (que no cantados, ya que allí la gente lo daba todo) fue Barkhatu, canción mítica de su colectivo Chill Mafia. «Zaindu maite duzun hori», referencia a Ruper Ordorika, que quiere decir «cuida aquello que amas», puede describir perfectamente el proyecto de Hofe. Más tarde, la sala terminó de explotar con Mzmz (Tek), un viaje sonoro con los BPMs al máximo que hizo saltar y bailar a todos los espectadores.
En definitiva, debemos agradecer a Hofe su paso por la capital, demostrando que no será el último y que cada vez más gente acudirá a su show por razones lógicas. Su sonido, su directo y su actitud le colocan como uno de los rookies del año, y solo él conoce sus límites, ya que a su público no deja de sorprenderle gratamente.
