Ya está aquí "el tiempo de Manuel", ese tiempo de soplos frescos, de nuevas canciones de "El puchero del Hortelano" que desde Harumaki no han parado de girar ni de cosechar éxitos. Musiqueando estuvo con ellos: (responde Antonio Arco)
– El nuevo disco…"el tiempo de Manuel", existe Manuel?
Existen muchos "Manuel". Con Manuel hacemos referencia a toda la gente nueva que viene a este mundo y a todos que dejan una vida anterior para comenzar una nueva o empiezan una nueva aventura.
– En "la guía" escuchamos un instrumento, el sitar, ¿es una constante en el sonido de "El puchero" buscar precisamente eso, nuevos sonidos?
Sí, nos gusta. En este caso en particular conocíamos a Saeed Khan, el músico que toca el sitar, y ya vino todo rodao. Tiramos de amigos y de gente a la que nos vamos encontrando por la vida. A Saeed lo invitamos un día al estudio, se trajo algo preparado y así surgió todo.
– Prácticamente desde Harumaki, vuestro disco en directo y ahora la promoción del nuevo no habéis parado de girar…¿es el mejor momento del Puchero del Hortelano?
Sin duda. Nosotros hemos empezado desde abajo y la clave de que hoy estemos aquí es que siempre hemos ido superando objetivos: vendiendo más disco, más descargas, cobrando más, por qué no decirlo también, llenando salas, actúando en festivales de más caché…El camino es bonito cuando vas ascendiendo, si te quedas estancao o vas hacia atrás tiene que ser muy duro y para nosotros, afortunadamente no ha sido así.
– ¿Se cumple en vosotros el tópico de que las canciones se gestan en el trancurso de una gira o necesitais aislaros para crear?
La verdad es que puedo componer en cualquier momento. Soy una persona que lo mismo te hago cinco canciones del tirón que luego me llevo cinco meses en blanco. Si es cierto que para componer me gusta estar tranquilo pero llevamos mucho tiempo sin parar, no hay mes que no toquemos. Hemos desarrollado un instinto para aprovechar al máximo el poco tiempo que tengamos así que yo llevo las canciones con guitarra y con voz y el resto las visten.
Hay canciones que en un día, o un par de horas quedan listas y en cambio hay otras que las miramos y las miramos pero no hay forma y siempre se quedan un par de ellas fuera del disco. Estas las tenemos guardadas para cuando no haya inspiración las sacaremos.
Y hablando de sitios tranquilos, Las Alpujarras no son mal sitio para grabar ¿no?
Uff, es un sitio muy bueno. Hemos grabao otros discos en prácticamente un zulo o un sótano que entrabas y no sabías si era de noche o de día. El estudio es muy pesao, tienes que escuchar muchas veces la misma canción, la misma toma y acabas un poco loco.
Este sitio en las Alpujarras es un nuevo proyecto de Producciones Peligrosas donde hay un chalecito, al lao del río, en plena Alpujarra y además con piscina. Literalmente era grabar una voz, darte un baño en la piscina, salir con la toalla puesta todavía y continuar escuchando.
¿Tienen cabida grupos nóveles o gente que apadrinais en Aficiones Records?
No, nos lo han dicho alguna vez pero no. Nos cuesta mucho trabajo llevarnos a nosotros mismos y la cosa está muy mala con distribuidoras que se van hundiendo por momentos. Ya nos cuesta mucho esfuerza llevar toda esta infraestructura nosotros mismos como para poder llevar a nadie más.
– Como andaluces al salir a ciudades como Barcelona, Madrid, Valencia y ver que allí se acoge bien vuestra música…¿sentís algo especial?
Sí, todo ha ido poquito a poco. Por ejemplo la primera vez que estuvimos en Barcelona fue en 2002 y venían a vernos 30-40 personas. Ahora van mil y pico a la sala Apolo y hacemos sold out en la sala Bikini,..
Este año ha sido el primero que hemos girado fuera de España y sí que resultó más chocante. Por ejemplo estuvimos en Varsovia, en un concierto nosotros solos y veías a la gente pidiendo Asuntos Serios e intentando cantar nuestras letras, todo muy sorprendente.
– ¿Y por Canadá?
Allí estuvimos en un par de festivales increíbles, 20.000 personas, 7 escenarios y un civismo increíble. Podías dejar tu mochila debajo de un árbol irte y al volver encontrarte la mochila en el mismo árbol que la habías dejao. Y con la gente un buen rollo increíble, los conciertos salieron muy bien y han estado marcados por el Mundial con la gente diciéndonos "congratulations for de world cup!"
Además estuvimos por Alemania y en Inglaterra con Los Delinqüentes salió una noche muy guapa. Pero como te decía lo más chocante fue en Varsovia donde nos habían radiao más y la sensación fue lo más parecida a un concierto de aquí.
Volviendo al disco, algunas canciones parecen ser vuestro legado, una declaración de principios, ¿es algo así? van por ahí los tiros de "No me gusta"?
No me gusta es un tema muy personal. Me pilló con algunos cambios en mi vida. Somos personas muy normales, para nada somos famosos pero al ser personajes públicos a veces por internet se dicen cosas de ti que no son ciertas y que llegan a oídos de familiares y de amigos y de esta rabia y de estar harto de muchas cosas salió esta canción. Salió prácticamente sola y son de esas que en una hora estaban listas y además parece que está gustando.
– Con la sección de viento bien asentada y con peso en muchos de los temas y la continuidad de Patricia a la guitarra, ¿estamos ante una formación estable del "Puchero del Hortelano"?
Yo creo que sí, más que nunca. De hecho antes de Harumaki todas las formaciones habían sido cambiantes y a partir de ese disco ya ha sido la misma. Son 3 años del tirón, en un buen momento pero muy duros también, muy exigente para todos. Por ejemplo yo este año recién he tenido un niño y a los 25 días me tuve que ir a Canadá. Si no estuviéramos de verdad unidos y no tuviéramos el cariño nuestro todo esto sería imposible.
– El próximo sábado tocáis en la sala Q (Sevilla) que ya ha anunciado que cierra sus puerta a final de año, ¿qué pensais de que pasen estas cosas alrededor de la música?
Sí, me enteré hoy. Es una putada. En Sevilla es la única sala que tiene un aforo grande. Otros años vinimos a Malandar pero las últimas veces se había quedao pequeña. Es una faena. En general sí notamos que hay bastante ambiente de sala. Cuesta trabajo encontrar sala para tocar pero es por la demanda que hay. El mercado clásico de la música está en crisis pero sin embargo lo que es salas, festivales y sobretodo la gente con ganas de ver música en directo está muy bien y eso es bueno.