El verano se va, pero el recuerdo del Granada Sound 2023 se quedará para siempre.
Como vuelve a ser tradición el final del verano tiene una ineludible cita con la música y con la ciudad del rock, Granada acoge de nuevo un festival que se va consolidando año tras año en la escena nacional, así que para poder dar por concluido el verano antes debe celebrarse el Granada Sound.
Con los abonos agotados desde meses antes de la celebración del festival esta edición tenía un cartel con pesos pesados de nuestro panorama indie nacional, faltaba este año ese concierto internacional que tanto gusta por acá, pero aun así muchas caras conocidas y lo que viene siendo un cartelazo.
El viernes, mucho antes de que se abrieran las puertas del Cortijo del Conde se celebraba en Discos Bora Bora un showcase a mano de Tigre y Diamante, pero en lo que se refiere al festival fueron Niños Luchando los encargados de abrir el festival en el escenario La Placeta.
Este que os escribe os va a detallar lo que fue viviendo en el festival ya que por desgracia no se puede estar en todos lados a la vez; una llegada al recinto bien organizada con una zona de food trucks bastante bastante completa y variada, hasta con puesto de Burger King y de Taco Bell, este año como novedad también la zona VIP estaba en el margen izquierdo y no en el derecho para supuestamente dar un poco más de espacio al recinto, ya que es de forma rectangular y en los conciertos principales es mucha la masificación y es casi imposible moverse por la zona, pero vamos a la música que es lo que nos importa; Siloé fue la primera de las apuestas en los escenarios principales, Veintiuno con el cual ya se notaba que el recinto iba cogiendo músculo, es un grupo que cada vez va a más y que sabe cómo poner en marcha un festival, Diego acabó vistiendo con la remera del Granada y tuvo la colaboración de Ines Hernand en La vida moderna.
Volvían a Granada los burgaleses La M.O.D.A, justo su última aparición en el festival fue en 2019, empiezan ellos mismos en off y Catedrales es la carta de presentación de la banda en un concierto que fue siempre a modo ascendente, La M.O.D.A saben conjugar a la perfección vanguardia y tradición, con la raíz y el folk como base principal, con letras profundas y desgarradoras, hicieron repasos últimos trabajos, es más estrenaron Hablar sin leísmos, canción que publicaron muy recientemente y que tiene gran pegada; pero hubo tiempo también para los éxitos primeros de la banda como Los hijos de Johnny Cash o 1932 y con Héroes del sábado pensábamos que iba a ser el final pero no, fue con Mañana voy a Burgos, que me parece maravilloso terminar con esa canción como declaración de intenciones, bajaron al foso como suele ser bastante tradicional en ellos y se despidieron de las primeras filas.
Turno y momento para Rufus T. Firefly en un horario tan especial que para ellos era hasta raro (dicho por Victor a mitad del concierto) crearon magia, una atmósfera y un ambiente de nebulosas que hizo las delicias de los allí presente, buen gusto, buena selección de temas y me reitero, crearon un ambiente de psicodelia y magia dignos de otro universo.
Empezaron el concierto con Torre de marfil con Victor a las teclas frente a frente de Manola para después coger la guitarra y tirar por Lafayette, (al igual que da comienzo su disco El largo mañana) saludan al público, agradecen al festival y con Magnolia que vuelven al ataque y con Río Wolf que es un cañón de canción.
Fue gracioso un momento donde Victor cuenta que leyendo comentarios leyó a alguien que dijo que poner a las diez de la noche a los Rufus, que quienes eran, pues él dice, somos los putos Rufus y creo que a quien puso tal comentario le quedó quienes son los putos Rufus, vaya conciertazo dieron y es que justo de esa anécdota presentaron la colaboración de Anni B Sweet en Selene, iban finalizando con Sé dónde van los patos cuando se congela el lago, acaban una gira de conciertos en Granada para tomarse un tiempo para escribir nuevas canciones, repartieron mucho amor y recibieron mucho amor y por eso cantaron Nebulosa Jade y les prometieron a los amigos de Arde Bogotá cerrar con Pompeya.
Ahora parece que había un bloque pensado y hecho en honor a la región de Murcia, se vendrían tres de sus emblemas más insignes musicalmente hablando, el primero de ellos uno de los grupos que más gustaron (se palpó en el ambiente y entre las conversaciones de la gente de lo más destacado estaban ellos) Arde Bogotá.
Y es que empezar con Los perros es ya toda una declaración de intenciones y es que estos cartageneros soltaron los perros y lo soltaron a lo grande, causando auténtico fervor, la voz de Antonio te atrapa desde el segundo uno y es que son buenísimos, buenas letras, riffs diabólicos… lo tienen todo para triunfar. Presentaron Cowboys de la A3 y su anterior disco, La noche, hicieron crossover junto a Rafa Val y Cantua de Viva Suecia en Que vida tan dura, le siguió Millenial, o temazos como Exoplaneta, Antiaéreo y es que sin duda fueron una de las sensaciones del festival, para mi top 3 sin duda alguna y van subiendo y subiendo, de hecho, son dos las nominaciones que se han llevado para los Latin Grammy de este año.
Y es que como dije parecía que había bloque a la murcianica en el festival, tocaba turno a los hermanos mayores de los cartageneros, llegaban los suecos.
Viva Suecia, mas que consolidados en el panorama nacional arrancaron con No hemos aprendido nada, gran expectación para ver a los murcianicos, no obstante se les podría considerar cabeza de cartel de la jornada del viernes, bastantes banderas y camisas suecas por el recinto, Algunos tenemos fe en ellos y en que harían un directazo y así fue, como de costumbre, con un ramillete de canciones donde se incluían Hemos ganado tiempo, donde Rafa se baja al foso con el público, Justo cuando el mundo apriete la cantó todo el recinto ya que justo cuando la acabaron hicieron cantarla a capella y es impresionante cuando tal cantidad de gente canta al unísono, debe ser una sensación increíble para alguien que hace algo en la intimidad de su casa y te devuelvan un regalo de tal magnitud.
Al saxo estaba Esdras Boyajian que lo dejaron solo y tocó unas pinceladas de Mr. Saxobeat o el Seven Nation Army y justo a la vuelta les devolvieron el crossover y volvieron los cartageneros a escena para interpretar El bien y hubo traca final de concierto con confeti y cohetes con Todo lo que importa, sin duda Viva Suecia nos importa y mucho, se ha hecho un hueco en nuestras bandas favoritas.
Y es que no hay dos sin tres, presentaban show a modo de programa televisivo Varry Brava, iban a poner a bailar a todo el Cortijo del Conde, lo sabíamos todos y así fue, había que ir cerrando la primera de las jornadas y es que con el arsenal de canciones disco que traían como no iba a ser así, hicieron un medley recordatorio de su primer disco ya que hace diez años desde aquel Demasié, Raffaella, su canción eurovisiva, No gires, Fantasmas y es que esta banda sabe cómo se ha de cerrar un festival, aunque ellos no fueran los encargados de cerrarlo para mí sí que fue la última banda que vi.
Y es que el sábado se volvía a la carga y desde bien temprano porque tenía muchas ganas de ver a Karavana, esta banda madrileña emergente que hizo concentrar a primera hora del día en horario festivalero a bastante bastante gente, mucho fan con camisa y un directo bien potente, era la primera vez que los veía y me sorprendieron para bien y es que con temas como Resaca pop, Madrid, versiones como Tití me preguntó o Strokes donde pidieron hacer un gran pogo mientras Gonzalo bajó y se lió lo más grande te hacen ver que Karavana son una banda de contacto con su público, muy cercanos y electrizantes, sin duda alguna grata sopresa.
Ciudad Jara les tomó el relevo y para mi gusto después de toda la energía que soltaron los Karavana el ambiente se vino un poco más abajo y relajado, es cierto que es una banda que suena contundente, pero me supo a poco.
Decidí ver una pincelada de Chica Sobresalto y fue una buena decisión, tenía un reducto de fieles en el escenario de La Placeta y es que Maialen desprende altas dosis de buen rollo, siempre sonriente y con viveza, no paró de saltar, ví el principio del concierto, arrancó con El hogar y tengo pendiente de ver un directo de principio a fin porque me dejó con ganas de más, el problema es que se solapaba con Iván Ferreiro y tenía muchas ganas de ver que nos presentaba en directo después del estreno de Trinchera pop, su último disco y es que forma parte de la banda sonora de muchas vidas y sería de delito el saltarse su concierto, un artista que lleva toda una vida dedicada a el noble arte de la música y hasta la fecha, en todos los conciertos que he estado de él siempre me he quedado con ganas de más, nunca falla y es por eso que no podía perderme nada de su directo.
Canciones para no escapar fue su apertura en Granada, Iván es un loco de los sintetizadores y este show iba a ir muy encaminado en eso, creando atmósferas y ambientes muy particulares.
Dejar Madrid, canción escrita por su hermano Amaro, con el cual cantó abrazado a él, saludó al público y aseguró cantar Turnedo, ya que la última vez que estuvo no la cantó y la gente se enfadó, según palabras del propio Iván.
Un repertorio muy bien seleccionado para la ocasión con clásicos como Como conocí a vuestra madre, mezclados con la presentación del último disco (obra maestra para mi gusto) o por ejemplo viejas glorias de Los Piratas como M, todo el festival cantó El equilibrio es imposible, Turnedo como había prometido la tocó y cerró de manera magistral con En las trincheras de la cultura pop.
Momento de descubrir para mi a otra de las cabezas de cartel de este Granada Sound 2023, Amaia, la verdad que me extrañó al ver su confirmación en el cartel pero había que ver como encajaba y la verdad que encajó a las mil maravillas, Amaia dio en Granada su último festival y su penúltimo concierto de esta gira con la cual ha estado año y medio girando.
Si bien es cierto que me pasó al principio un poco lo mismo que con Ciudad Jara después de Karavana, venía sobreexcitado del concierto de Ferreiro y Amaia bajó las revoluciones, empezó su concierto sentada sola al piano, un foco centrado en ella y Bienvenidos al show, la cosa la fue animando poco a poco, se ve que a pesar de su juventud viene ya de vuelta y tiene todo el espectáculo más que medido, no paró de un lado al otro del escenario, de bailar y de interactuar con un público entregadísimo.
Me dejó loquísimo donde hasta hizo un poco del Ave María de Bisbal, cosa de triunfitos, también fue bastante espectacular que interpretase Yamaguchi solamente ella con Amaia, su guitarrista y hubo un silencio en todo el recinto bastante respetuoso, me pareció digno de destacar, ya que después de casi todo un día de festival con lo que ello conlleva que la gente guardara tal silencio, ya digo, digno de destacar.
Después de eso es verdad que fue poco a poco subiendo, hizo una versión de Los Planetas, concretamente Santos que yo te pinte y fue elevando el ritmo a medida que se acercaba el final del show con canciones como El encuentro, pero es cierto que es un show un tanto relajado para el horario al que estaba programado para mi gusto.
Con Sexo en la playa, Así bailaba y con La canción que no quiero cantarte sí que animó un poco la cosa finalmente, pero no había problema porque si queríamos animarnos teníamos a los chicos de La Casa Azul, comandados por Guille Milkyway fueron una fiesta constante de principio a fin, es que esta gente si que tienen tomada la medida de los festivales al dedillo, con un show con unos audiovisuales tremendos, donde la luz tiene un papel fundamental, donde no escatiman en papelillos, fuego y humo, La Casa Azul es el cierre perfecto o el comienzo perfecto, siempre encajan, sea cuando sea.
Y es que, quién puede resistirse a no bailar y cantar a voz en grito Los chicos hoy saltarán a la pista, Podría ser peor, Esta noche solo cantan para mí y un largo etcétera de temarrales.
Fue una comunión perfecta con el público que evidentemente lo dio todo con La revolución sexual y un cierre más que épico con Nunca nadie pudo volar.
Y ahora sí que se venía el cabeza de cartel del festival, Vetusta Morla venía presentando en Granada en su gira de festivales su Cable a tierra.
Un recinto hasta la bandera (a veces un poco agobiante de la pelotera que había ya que creo que fue el momento más álgido del concierto y donde más concentración de personas hubo) y es que los chicos de Tres Cantos tienen un ejército de fieles y es lógico porque son brutales, tienen una química y una magia especial, comandados por Pucho, No seré yo fue la primera de las balas en una batalla de temazos, uno tras otro, es que los Vetustos son una maquinaria engrasada a las mil maravillas y probablemente sea de las bandas más cotizadas del país.
Virgen de la humanidad, La mosca en tu pared, Finisterre, 23 de Junio, Maldita dulzura, Mapas, ¿Qué os parecen todas estas canciones? Si es que no falla el repertorio, todo cuela, también invitaron en Te lo digo a ti a Tania y Victor de Ladilla Rusa, es que todo lo que tocan lo convierten en himnos como Valientes, evidentemente Copenhague, que ya es un himno pero generacional, Pucho hace un manifiesto recordatorio de las bandas que están en el festivales y de las bandas emergentes que están en las pequeñas salas y piden el apoyo a estas ya que ellos están donde están porque vienen de ahí mismo de las pequeñas salas.
Llegaba el momento de la despedida y claro, son Vetusta Morla, sería a lo grande Los días raros nos regalaba la imagen del festival, con esos cohetes de fondo y un Cortijo del Conde abarrotado hasta la bandera.
Con Second llegó la despedida de la banda Murciana con la ciudad de Granada tras 26 años de carrera musical ya que la banda se retira, pero dejó en la retina de los asistentes un último baile a la altura, en Granada tendrán siempre un Rincón exquisito y es que mucha gente los va a echar de menos.
Y las penas son menos penas si se bailan y para este cierre de ocasión teníamos a los Ladilla Rusa, que ya nada más que aparecer con Macauly Culkin pues te puedes imaginar lo que es, se te van todas las penas y solo quieres mas de su costumbrismo mágico, con temas como Kitt y los coches del pasado o Bebo, Tania y Victor son una bomba de relojería y saben poner patas arriba un festival, para mí fue el cierre del festival ya que llevaba una jornada intensa a pesar de que aún quedaban We are not Dj,s para quien quisiera ya acabar por todo lo alto.
Se nos vuelve a escapar otro verano, otra edición del Granada Sound, festival que sigue consolidándose en el panorama nacional de festivales, es cierto que el recinto se les queda algo pequeño y que a veces como en conciertos de Vestusta llega a ser agobiante, siempre hay que seguir trabajando por mejorar, pero sin duda, uno de mis festivales de referencia que sigue evolucionando y está muy bien posicionado, así que Granada le dice adiós al verano pero ya con la mirada puesta en el futuro, porque tenemos fecha para Granada Sound 2024, así que toma nota, serán los días 13 y 14 de septiembre del próximo año, así que, pongan su contador en cuenta atrás que ya, queda un día menos.