Carlos Sadness volvió a deleitar a su público sevillano el pasado 8 de diciembre. Como todas las ocasiones en las que el cantautor barcelonés ha actuado en la capital andaluza, la expectación fue máxima. Aunque en esta oportunidad, no sólo fue por volver a tener la oportunidad de disfrutar con sus originales directo, sino también porque de este modo tanto artista como público se desquitaron del encuentro frustrado del festival Interestelar del mes de octubre. La lluvia impidió la celebración de la segunda sesión, aquella en la que él debía haber cantado, por lo que las ganas del reencuentro eran muchas.

Tras colgar de nuevo el cartel de «sold out», y ya han sido muchos durante la gira `La idea salvaje´, Carlos Sadness llegó a la sala La Calle provisto de su espontaneidad, frescura y sus ritmos tropicales, para transportarnos de la fría noche sevillana a las cálidas playas de Hawai.

Temas como `El día que dejaste la tierra´, `Perseide´, `El gran momento´ o `Miss Honolulú´ formaron parte de la primera mitad del concierto. Regresó con sus incondicionales con `Houdini´, la canción dedicada a su ukelele, en la que narra la peculiar historia que le une al mismo. Y, posteriormente, interpretó `Qué electricidad´, `Groenlandia´, `Hoy es el día´, etc., acabando con `Monteperdido`, ante la insistencia de un público deseoso de volver a escucharla.

Fue, pues, un repaso a su discografía, con la combinación de canciones de su último trabajo, `La idea salvaje´. Ni qué decir tiene que los asistentes al concierto de Sadness disfrutaron una vez más, generándose esa complicidad que sólo se puede dar entre dos partes perfectamente identificadas como son  el artista y sus fans.

Este último fin de semana supuso el cierre de su gira, comenzando desde ese momento a preparar los temas de su próxima producción. El polifacético artista quiso aprovechar el desplazamiento a Sevilla para firmar  ejemplares de su libro Anatomías íntimas, escrito e ilustrado por él.

Fotografías: Andrea del Zapatero.