Sala Fun Club- Sevilla
Desde que entramos vimos el buen rollo entre Zahara y los componentes de miss cafeína. Ella repetía en una ciudad conocida, para ellos era la primera vez, y lo reflejaron en una de sus primeras conversaciones con el público “nos estamos desvirgando en Sevilla, nos estáis desvirgando”.Así rompía el hielo miss cafeína y comenzaba a calentar a un público que demandaba sus canciones en esta primera visita, síntoma de múltiples descargas en las plataformas digitales de música online como myspace o la propia página web del grupo.
La presentación en directo de “Carrusel” nos traía los buenos sonidos a los que nos tiene acostumbrados esta sala. Pop regado por variadas influencias que camina con paso firme a un trabajo personal. No tardó en verse el feeling con Zahara, tras unos temas subía al escenario, teclado incluido, para acompañar en su debut a esta banda de pop en castellano. Mucha complicidad sobre el escenario, más tarde compartirían músicos e instrumentos, acoplando voces en duetos geniales.“Carrusel”, “Todos temblando”, “Píldoras”, “Tocar el suelo”, “La misión”, no se dejaron atrás ninguno de los temas que más están sonando, tiraron de repertorio y completaron con guiños a sus referencias artísticas, el público se lleno de energía entonando estrofas de Iván Ferreiro.
Nos presentaron lo que viene siendo su consolidación, con clara continuidad con los sencillos anteriores pero con un carácter más personal. Colaboraciones como las de Zahara participan de la gira de presentación de “Carrusel”, que continuará por Valencia, Alicante, Salamanca, Toledo, Madrid, Guadalajara, para terminar en Barcelona.Recomendado, potente directo que no debes dejar escapar. Lo de Zahara es punto y aparte, su relación con Sevilla es inmejorable, a su preciosa voz y buenos temas añade un sentido del humor peculiar que funde a la perfección con la idiosincrasia de los sevillanos.
Esta chica es artista sobre el escenario y eso sin cantar. Para cuando le da por comenzar con sus bonitas melodías ya nos tiene encandilados. Continua interacción y cercanía junto a una increible voz que hace temblar los cimientos de la sensibilidad de cada persona de la sala, eso nos ofreció Zahara en esta nueva visita.
Sabíamos lo que nos esperaba y de nuevo nos lo daba: momentos íntimos y melódicos, con fuerza cuando toca mostrarla. Un escenario completo por una persona, una delicia para los oidos. “Adios”, “Photofinish”, “Diciembre”, “Merezco”, “Chica pop”, … con la guitarra en las manos y acompañada por varios, pero siempre arropada por su bajista, nos muestra un variado repertorio lleno de anécdotas, vivencias propias o ajenas que siente en primera persona y que nos hace sentir nuestras. Tal fue el caso de “La canción más fea del mundo”, según nos contó hasta ella abandonó con el café en las manos al protagonista de la historia, la situación era más fuerte que la amistad, para saber más acudid a sus conciertos. Para deleite del público, Zahara se marcó un bis y respondió a la petición más insistente de la noche “Con las ganas”, una canción especial con mayusculas con la que llenó por última vez el escenario antes de despedirse haciendo un corazón con los dedos.