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Bryan Adams, el eterno verano

Poradmin

Dic 5, 2019

5 Diciembre de 2019, Palacio de los Deportes de San Pablo, Sevilla

 

Bryan Adams nos ha regalado esta noche mucho más que un completísimo concierto de 2 horas y de un sinfín de éxitos de su trayectoria. Bryan Adams hoy nos regaló el verano eterno de ese Peter Pan que se resiste al paso del tiempo como el propio rock.

 

Ese calor de su música y de su voz que no da muestras de agotamiento sirvió para que un día de diciembre y en un recinto que no se caracteriza por ser especialmente acogedor los que nos congregamos allí nos declaremos en verano permanente entre la nostalgia y la búsqueda de nuestros propios sueños. El show del canadiense alternó con maestría temas de su nuevo disco (y que da nombre a esta gira) Shine a light junto a éxitos reconocibles y que ansíabamos escuchar en directo (la mayoría por primera vez). Una gran producción y una banda solemne y brillante vestían con sensibilidad temas como Heaven o bien viraban hacia el lado más eléctrico del repertorio con temas como 18 till i die.

 

Hubo lugar para momentos brillantes con Bryan Adams sólo con la acústica y escuchar las peticiones del público (en este punto llegó por ejemplo Please forgive me) así como vivir en primera persona ese maravilloso tema que creó el canadiense junto a Paco de Lucía y que sirvió de banda sonora de la película Don Juan de Marco de título Have your ever really loved a woman?

 

Más allá del setlist fue un concierto cargado de emoción y un público que fue entregándose al espectáculo que Bryan Adams trajo a Sevilla demostrando que esta ciudad puede ser, sin complejos, parada de grandes giras internacionales.

 

Fuimos veraneando en cada canción, haciendo nuestra cada sensación que se nos brindaba del escenario hasta que casi sin darnos cuenta Bryan Adams quedaba solo en el escenario para contarnos su historia de cómo conoció Sevilla y el flamenco gracias a su padre cuando era pequeño y despedirse con All for love y un poquito de let´s make a night to remember que resultaba toda una obviedad.

 

Eso sí, algunos aún seguíamos con una parte de nosotros en ese espectacular Summer of´69 que cumplió nuestras expectativas y en el que nos quedamos eternamente.

 

 

 

 

 

 

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