Cualquier melómano que se precie no puede perderse en directo una serie de grupos y Bruce Springsteen and de Street Band es uno de ellos. Las palabras no son suficientes para expresar sus conciertos en los que publico y músicos se funden formando una sola voz .En ese momento se produce algo mágico que sólo pertenece a los están allí en ese preciso momento y que permanecerá para siempre en su recuerdo. No importa cuantas veces los hayas visto siempre te quedaras con ganas de más, porque sus actuaciones sus únicas e irrepetibles. Cada día es un concierto completamente diferente Empezando porque llegado un determinado momento de la actuación Bruce se pasea por el borde del escenario y baja al foso para recoger pancartas con las peticiones del público .Debido a que cada país y cada persona es diferente nunca realiza el mismo set list.
A las nueve y media de la noche saltaban al escenario de un Estadio Zorrilla a rebosar y que se encontraba preparado para una velada inolvidable Bruce. Con “Badlands” y “No Surrender” comenzaros tres intensas horas de concierto en el que el ritmo no decayó ningún momento y todos los presentes no paramos de bailar y corear todas y cada una de sus canciones. Sin apenas tiempo para hablar tan sólo chapurreo en español para decir en varias ocasiones "Valladolid, nosotros ponemos la música, vosotros ponéis el ruido” enlazó una canción con otra .Bruce se entrega como pocos a sus fans .Se paso toda la noche correteando al lado de las primeras filas , dándoles la mano , acercando el micrófono a los fans más pequeños para que cantasen e incluso dedicó Surprise surprise “a una chica que se lo pedía a través de un pancarta , en la que también indicaba que ese se mismo día cumplía catorce años .
Pasados veinte minutos de actuación sonaba “Hungry Hurt” arrancando una sonrisa de felicidad en los rostros de todos los asistentes y dejando de cantar el estribillo para dar total protagonismo a los fans. Como siempre que la canta Bruce sacó a una chica de las primeras filas a bailar “Dancing in the dark “tema que para mí gana muchísimos enteros en directo. La sorpresa de la noche fue “Johnny 69 “que según tengo entendido jamás ha tocado en España y no tocar dos grandes clásicos –Su mitica balada “Te Rivera “ ( que supongo fue sustituida por la preciosa" Something in the Night “para responder a una de las pancartas de las primeras pancartas ) y “Born in the Usa “.Acojonantes sonaron las versiones de la improvisada “Great Balls of Fire “ de Jerry Lee Lewis y “Twist and Shout” de los Beatles .
En esta última no se le ocurrió otra cosa que la simpática idea de hacer un medley con la bamba .y es que es este personaje tiene el cariño que se merece porque no sólo se da hasta el final sino que encima no para de bromear ya sea a través de su macarrónico español , con la bamba o haciéndose asistir por un falso medico que le proporcionó oxigeno artificial . Para concluir decir que toda la banda funciona como una maquina perfectamente engrasada en la que todas las piezas encajan y se complementan. Bruce no paró acercar el micrófono a al guitarrista Steve Van Zandt para que cantara con él gran parte del repertorio. Tras tres horas de concierto y un “Gracias Valladolid os queremos “se despiden dejándonos con ganas de más.