Aunque parezca que es muy sencillo poseer personalidad propia, para un grupo natural de una de las ciudades Meca de la música en España desde antaño como lo es Granada, no es nada fácil el evitar seguir corrientes que triunfaron y triunfan a día de hoy. Y es que crecer en tu ciudad bajo la estela musical de Enrique Morente, Los Planetas, 091, Miguel Rios, Lagartija Nick y Los Ángeles entre otros, a parte de un privilegio y un escaparate de grandes artistas, hace ver la música con otros ojos, con otro aire.
Apartamentos Acapulco originalmente nació en 2015 de la mano de Angelina Herrera e Ismael Cámara, a los que posteriormente se les unirían Charly Gang, Pedro Velardo y Efrén Gaz dando lugar así a la formación actual del grupo. Es en la última mitad de 2016 cuando ve la luz su último proyecto, del cual os hablaré hoy, Justo Y Necesario. Si hubiera que describir con una sola palabra a Apartamentos Acapulco y a la vez cada uno de sus trabajos, sin lugar a dudas la palabra perfecta sería personalidad. Cada canción que componen es en sí un pequeño universo, un mensaje crudo y directo a la vida, un himno que llevar por bandera. Y por supuesto, Justo Y Necesario no iba a ser menos.
Cuatros son los temas que conforman este Ep, que viene bajo el sello discográfico de Discos Imaginarios, y la canción encargada de introducirnos de lleno en este proyecto es Scarlett. Quizás la mejor y más representativa canción del disco, retoma la fórmula del grupo Él Mato A Un Policía Motorizado de crear canción con la repetición de una o dos frases, a través directamente del mensaje nos muestra la crudeza de las promesas y la esperanza, que aun pareciendo indestructible, va menguando poco a poco hasta casi desaparecer.
Tú me decías que me querías,
que ibas a estar toda la vida,
conmigo.
Tú me decías que me querías,
que ibas a estar toda la vida,
y era mentira.
Otra de las canciones de este Ep que muestra toda la fuerza y carácter de Apartamentos Acapulco es El Que Pierde El Tiempo. Con un comienzo casi susurrante, el tema evoluciona en dureza y en musicalidad a lo largo de la canción. Comienza ésta con ritmos suaves llegando a ser mucho más fuertes conforme se acerca al final, y en cuanto a letra, nace pintando a una persona de manera idealizada casi divina para evolucionar y morir con la dura realidad, que nadie es de nadie.
Un punto a tener en cuenta de este grupo, y que tantos otros intentan tener pero no lo consiguen o no al menos del todo, es esa la habilidad para hacer al oyente evadirse de este mundo pero teniendo en todo momento los pies en la Tierra… en ese estado de felicidad o tristeza, ambos agridulces, ambos con sabor al otro… Una sensación mágica y reconfortante. No dudéis en darles una oportunidad, no os defraudarán, seguro.